Al enterarnos de que una emblemática novela de Larry Mcmurtry se estrenaba y en especial, oficiando de un reencuentro muy esperado, la emoción fue grandísima. "La fuerza del cariño" es la versión teatral de una película también icónica, que en 1984 se llevó el mayor galardón de Hollywood, el Oscar a mejor película y dirección para James L. Brooks, cuyo guion es la base para esta pieza.
Para esta puesta, producida por una reconocida figura cultural, Ángel Mahler, se eligió una directora muy demandada en la cartelera y que posee en su mirar la sensibilidad que esta preciosa historia necesitaba, ella es la inmensa Corina Fiorillo, que ya trascendió su oficio para ser reconocida principalmente en cualquier obra.
En un comienzo mencionaba que una pareja se reencontraba y me refiero a Soledad Silveyra y Osvaldo Laport quienes mantienen la química intacta, su presencia en escena es mágica, amén del carisma indiscutido que tienen por separado. Estrellas muy queridas se ponen al servicio de la historia y los papeles les quedan muy bien, Solita desprende una ternura, una comodidad teatral que nos hace disfrutar la obra; Osvaldo, con una picardía atrayente fluye y se desenvuelve en la melodía de la historia.
Julieta Ortega se destaca también protagonizando la pieza con soltura y a la vez firmeza interpretativa, fundiendo el triángulo actoral positivamente.
Críticas atrás mencionaba lo importante del trabajo de esos actores "secundarios" por definirlos de alguna manera, que son el nexo entre los protagonistas y en especial de la historia. Tanto Dolores Ocampo cómo Damián Iglesias no necesitan presentación, su trabajo habla por sí solo, festejo su incorporación y a la vez felicito nuevamente su performance en esta obra.
Cuando uno recuerda la película y su narración le resulta dudoso que se logre esa nostalgia, esa fluidez en una obra que, inclusive, dura menos (el filme era de 130 minutos) pero está plasmada adecuadamente para que podamos meternos en los cambios de escenario y de épocas, gracias también a un solvente trabajo audiovisual que nos va relatando diferentes momentos de la vida de los protagonistas.
Y si mencioné a Mahler, por supuesto, la musicalización es un regalo a los oídos.
"La fuerza del cariño" enaltece la cartelera no sólo por lo que representa su recorrido artístico, sino también porque el resultado es muy bello de ver; emocionando genuinamente y sin golpes bajos, cerrando con un broche de oro con su pareja protagonista.
GUSTAVO SCUDERI