En la diversidad está lo bueno y la cartelera porteña lo está aplicando hace un buen tiempo, no solo por la cantidad de obras que hay para elegir, sino también por los temas que abordan. "Manuelita" es un acertado ejemplo y una bienvenida novedad en ella, se presenta dentro del marco de un ciclo denominado, "Les creadores", que cada mes irá estrenando obras con voces nuevas. Esta pieza de Alejo Sulleiro es un reflejo de este movimiento, creando una obra joven, dinámica y moderna, con una temática sumamente interesante, profunda y que si bien, ha sido muy retratada en el teatro, está aderezada con subtemas menos transitados. La adolescencia, el despertar sexual, los mitos, la discriminación y un tema en particular y permítanme mencionarlo llamativo, la autoestimulación, el auto placer, de ahí su título.
Dos mejores amigos, que se van contando experiencias, algunos con más rapidez, otros más inocentemente, lo que si es cierto que uno se siente atraído por el otro y debe enfrentarse a la realidad de que al otro no le pasa lo mismo. Desde esa perspectiva, el protagonista, irá tratando de descubrir su propio yo y respetar sus sentimientos, aunque su entorno se la complique. A través de la pieza de Alejo, quién también dirige, uno claramente ve cómo los chicos son expuestos a contextos homofóbicos, violentos, que solo llevan a la soledad o a escapar hacia rincones oscuros.
Los dos protagonistas están maravillosos representando dos opuestos, dos personalidades, Tiago Mousseaud y Tomas Corradi Bracco están dinámicos, magnéticos, el primero desde lo externo, lo verborrágico, desde su cuerpo, su gestualidad es maravillosa y Tomas lo genera desde adentro, más inocente, pausado.
Por lo que comenté en un comienzo, en la diversidad propuesta, en la fuerza de su joven voz y en su destacado elenco, "Manuelita" es una obra para elegir.
GUSTAVO SCUDERI
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