Ya sabemos que el Método Kairós tiene en su variada cartelera, propuestas siempre interesantes; es una carta con menú teatral y todas sus obras son atractivas, ya sea por sus actores, directores o dramaturgos.
El domingo a las 18 hs presencié una pieza en particular que está siendo un suceso, con localidades agotadas desde su estreno y vaticino que así será en ésta temporada. No sólo porque atrae a un público en busca de éstas historias, sino a uno general, que se va de la sala con una sonrisa de oreja a oreja.
"Sex Toy" tiene como su creador a un joven al que recién conozco y me dejó con ganas de más, Francisco Ortiz, quien también protagoniza la misma. Me llamó mucho la atención su escribir, el adecuado para una comedia, con los mecanismos exactos y bien aceitados en éste tipo de género. Desde que comienza la misma hasta su culminación, si bien no dura más de una hora, el tiempo pasa volando, esto es señal de que estamos ante una obra lograda, el público no tiene respiro.
Sus protagonistas tienen una química impecable, pareciera que son realmente amigos, sumada a la actuación de Francisco, está la de Seba Dartayete (anoten éste nombre) dueño de una ductilidad, agilidad y carisma ideal para éste género. Al igual que Silvia Kalfaian que, junto a Francisco (representan madre e hijo) la rompen en escena, también Silvia con una soltura y cintura perfectas. Por último y no por ello menor, Federico Donofrio, con un personaje más centrado se suma a un equipo muy lindo.
Quién lleva adelante la puesta, denota una mano experta y adecuada para esta obra, Pato Azor, pone ese toque que engancha cada domingo al espectador.
"Sex Toy" va desarrollando la historia de tres amigos, dos de ellos con problemas con las mujeres quienes buscan ayuda en su amigo gay para que los guíe en "probar" nuevos horizontes; la llegada imprevista de la madre demuestra que no todo es tan fácil como parece.
La obra es tan solvente que, si me atreviera a darle un consejo especialmente a Francisco, le diría que la pieza tranquilamente puede generar una secuela, una segunda parte que, seguramente, será un éxito rotundo (ya ha pasado con otras obras que manejaban conceptos similares). Sea como sea, y siguiendo con las sugerencias, les recomiendo que no se pierdan este trabajo tan bien hecho.
GUSTAVO SCUDERI
