Se estrenó "Alma Mahler", la segunda obra como dramaturgo de Víctor Hugo Morales y es una construcción narrativa e histórica muy interesante. Una mujer que desafiaba su época, una adelantada no sólo a su oficio de compositora y editora musical (mal visto en esos tiempos) sino también en su vida personal, musa inspiradora de grandes artistas y genios, entiendo que esa cualidad era para ella motivo de seducción.
La pieza repasa su vida y no tanto su obra, a modo de escribir un libro, abre y cierra la misma de esa lograda manera, retratando sus amores con Gustav Mahler, Walter Gropius, Franz Werfel, hasta su primer "beso" con Klimt y su huida del nazismo con Kokoschka. Una mujer que le dió prioridad y cuidó de sus parejas, dejando de lado su talento y carisma, pero dando ese halo de modernidad en su vida amorosa.
La puesta también cuenta con interludios musicales sin ser una obra musical, muy atinados y que nos permite apreciar el sonido y carisma de Juan Ignacio López, mucho tiene que ver en el resultado, que este dirigida y guiada por Pablo Gorlero, un experto en el rubro, que pasado el tiempo se atreve a un teatro más tradicional, con la misma calidad y solvencia.
El rotundo protagónico de una actriz increíble, que al igual que un orfebre, talla al personaje con su impronta, ya lo había hecho en la excelente “Rota” aquí nuevamente es magnífico su trabajo, su presencia, su paso por el escenario es de una delicadeza y preparación meritorios, Raquel Ameri sin dudas es un nombre a seguir.
“Alma Mahler, sinfonía de vida, arte y seducción” es una propuesta a tener presente porque posee una actuación exquisita y magnética, bajo un texto muy nutrido e interesante y una delicada dirección.
GUSTAVO SCUDERI